¿El árabe es tan difícil como parece?

Hola a todos, hoy abro un debate con vosotros. Y consiste en que mucha gente piensa “uf, el árabe es muy difícil, es otro alfabeto, otra historia, otra cultura… parece otro mundo”. Y quiero deciros las razones por las que, aunque no es un idioma fácil, pues aprender cualquier idioma no lo es… tampoco es tan complicado cómo lo pintan, vamos a ver esos puntos que lo hacen “algo más fácil”.

1. Hay palabras en el castellano de origen árabe

Debido a que España fue históricamente conquistada por un tiempo, por la cultura musulmana, el castellano o español, tiene muchas palabras sueltas que vienen del árabe.

Tal vez puedas pensar “pero aún así, yo que no sé árabe, no entiendo nada de lo que dicen”, déjame mostrarte un ejemplo:

En castellano tenemos muchos sinónimos (palabras diferentes con el mismo significado), como por ejemplo calendario y almanaque. Pues curiosamente “calendario” viene del latín (calendari) y esa palabra es “almanak” en árabe, de ahí viene la palabra “almanaque” y en castellano usamos “calendario” (del latín) y “almanaque” (del árabe) con prácticamente el mismo significado. Lo mismo pasa con muchas otras palabras, como “sorbete” (que viene de “sharbat” en árabe) y “beber” (que viene del latín) o con sofá (que viene del árabe y significa cojín).

Con lo cual, tenemos muchas palabras de origen árabe en castellano, aunque desconozcamos su origen y esto facilita un poco el aprendizaje del árabe.

2. No necesita reglas ortográficas

Tanto en español, como en árabe, si dominas el alfabeto, es relativamente fácil escribir y sobre todo leer, ya que se pronuncia todo como se escribe, cosa que no ocurre en muchos idiomas como el inglés, francés, alemán, etc.

Bien es cierto que la escritura árabe tiene sus dificultades, pero su principal punto a favor es que no necesita reglas ortográficas ni una especie de RAE del árabe, ya que por ejemplo no existen las mayúsculas.

Tampoco existen las típicas confusiones que podemos tener en español como “¿Va con b o con v? ¿Es con y o ll? ¿Será con g o con j?” Eso en árabe no sucede, porque cada letra es distinta. Sí que es verdad que hay ciertas similitudes y hay que saber pronunciarlas bien, porque si no se pronuncian correctamente, se pueden confundir a veces, pero una vez ya domines la pronunciación de cada una y cómo es la letra dependiendo de su posición, se te hará bastante fácil el leer y escribir correctamente, aunque no comprendas lo que lees o escribes.

3. Se escribe como se lee

Para finalizar, os comento otro punto bastante relacionado con el anterior y es que, al igual que en el castellano, cuando sabes escribir y sabes los sonidos, también sabes leer correctamente una frase o un párrafo.

Esto no sucede con la mayoría de idiomas, como por ejemplo el inglés, el cual requiere que aprendamos cada palabra de dos maneras: su escritura y su pronunciación. En el caso del árabe, esto no ocurre, puesto que si dominas los sonidos, además de no tener confusiones ortográficas, tampoco tendrás problemas para pronunciar correctamente.

¿Qué os ha parecido? ¿Has cambiado un poco esa opinión y empieza a parecerte algo más fácil el árabe? Déjame tu opinión en los comentarios. Un saludo.

1 Comment

Leave Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *